Varios estados de EE.UU. y el Distrito de Columbia han presentado demandas en contra de la popular plataforma de videos cortos TikTok, alegando que esta aplicación está afectando gravemente la salud mental de los jóvenes al promover un uso excesivo y adictivo de la plataforma. La denuncia, presentada por más de una docena de estados, es parte de una investigación nacional que se lanzó en marzo de 2022 por una coalición bipartidista de fiscales generales, en la que se incluyen estados como California, Nueva Jersey y Kentucky. La principal preocupación expresada en las demandas radica en el diseño de TikTok, cuyo algoritmo y características están, según las denuncias, cuidadosamente diseñados para fomentar el uso prolongado y excesivo de la plataforma entre los adolescentes, lo que lleva a graves consecuencias en su bienestar emocional y psicológico.
Preocupación por diseño de TikTok
Las demandas contra TikTok se centran principalmente en cómo la aplicación ha sido diseñada para captar la atención de los usuarios jóvenes a través de su algoritmo y otras características. El algoritmo de TikTok, que es el responsable de determinar qué contenido aparece en la página principal de cada usuario, conocida como “Para ti”, utiliza datos personales y hábitos de visualización para crear una experiencia personalizada y altamente atractiva. A través de esta estrategia, TikTok consigue que los usuarios pasen horas desplazándose sin fin entre los videos, atrapados por contenidos que se adaptan constantemente a sus preferencias. Además, las notificaciones emergentes y los efectos de sonido asociados con estas notificaciones refuerzan este comportamiento adictivo, mientras que los filtros que ofrece la aplicación distorsionan la apariencia física de los usuarios, contribuyendo a una creciente preocupación sobre la autoimagen, particularmente entre los adolescentes.
En el centro de la demanda, se señala que TikTok está diseñada para ser adictiva y que su algoritmo “induce dopamina”, una sustancia química que activa los centros de recompensa del cerebro, generando una sensación de placer y satisfacción. Los fiscales alegan que la plataforma sabe que su diseño está creando un ciclo de adicción, pero continúa fomentándolo para aumentar el tiempo que los jóvenes pasan en la aplicación. Este uso prolongado y desmedido, señalan, tiene serias implicaciones para la salud mental de los adolescentes, que se ven expuestos a problemas como la ansiedad, la depresión y el dismorfismo corporal.
Impacto de TikTok en la salud mental juvenil
Uno de los aspectos más preocupantes mencionados en la demanda es el profundo impacto que tiene TikTok en la salud mental de los jóvenes. De acuerdo con los fiscales, la plataforma sabe que su diseño lleva a los adolescentes a pasar horas consumiendo contenido, lo que a largo plazo genera problemas psicológicos y físicos. Estos problemas incluyen ansiedad, depresión, baja autoestima y dismorfia corporal, entre otros. El uso prolongado y el contenido que promueve expectativas irreales en torno a la imagen corporal agravan la situación. Además, los niños y adolescentes que pasan mucho tiempo en la plataforma pueden llegar a desarrollar una dependencia de las redes sociales, lo que impacta su capacidad para relacionarse en el mundo real y llevar una vida equilibrada.
Otro punto importante que resaltan los fiscales es que TikTok está diseñada para generar ingresos masivos a través de la publicidad. Mantener a los jóvenes conectados por largos periodos es clave para aumentar los ingresos publicitarios, ya que la plataforma se beneficia económicamente de la cantidad de tiempo que los usuarios pasan en ella. Esta lógica empresarial, según los fiscales, pone las ganancias por encima del bienestar de los usuarios más vulnerables, como los niños y adolescentes.
Acusaciones sobre menores de edad
Las demandas también apuntan a cómo TikTok ha permitido que los menores de edad accedan a su plataforma, a pesar de que existen restricciones diseñadas para proteger a los más jóvenes. La plataforma afirma que no permite el registro de menores de 13 años en su servicio principal y que restringe ciertos contenidos para los menores de 18. Sin embargo, los fiscales sostienen que estas medidas son fácilmente eludibles. Los niños y adolescentes, a menudo, encuentran formas de registrarse en la plataforma utilizando datos falsos o accediendo a través de las cuentas de adultos, lo que les permite saltarse las restricciones y exponerse a contenidos que no son apropiados para su edad.
A pesar de las afirmaciones de TikTok de que la plataforma es segura para los niños, los fiscales generales sostienen que la empresa no ha hecho lo suficiente para prevenir que los menores accedan a contenidos inapropiados o pasen demasiado tiempo en la plataforma. En las demandas se señala que la falta de controles efectivos sobre el acceso de menores a la plataforma agrava el problema de adicción y de salud mental que afecta a muchos adolescentes que utilizan la aplicación.
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