- Retrasos En La Obra Derivados De La Deuda A UANL
- Fugas Y Grietas Persisten En Presa León
- Factores Administrativos Incrementan Tensión Por La Deuda A UANL
- UANL Confirma Adeudo Millonario de AyD por la Presa León
La Deuda a UANL generada por Agua y Drenaje mantiene detenida la supervisión final de la Presa León. Cerca de 300 trabajadores permanecen sin salario debido al adeudo acumulado, mientras la obra sigue sin entregarse por fallas técnicas pendientes. El escenario involucra decisiones administrativas de la paraestatal y aumenta las críticas hacia la gestión del gobernador Samuel García.
Retrasos En La Obra Derivados De La Deuda A UANL
La supervisión de la Presa León está detenida debido a la Deuda a UANL que mantiene Agua y Drenaje desde hace varias semanas. Según fuentes del Instituto de Ingeniería Civil, el organismo adeuda 75 millones en salarios y 15 millones adicionales por estudios técnicos realizados como parte de la revisión estructural del proyecto.
Los trabajadores afectados señalaron que llevan más de cuatro quincenas sin recibir salario. Entre ellos se encuentran especialistas en construcción, técnicos de laboratorio, docentes, personal administrativo y empleados externos contratados vía intermediarias. La suspensión de pagos impactó directamente en las operaciones diarias que requiere la supervisión de la obra.
Crónica De Una Deuda
El adeudo paralizó la actividad en laboratorios universitarios, donde se realizan pruebas esenciales para dictámenes de seguridad. Sin recursos financieros, los equipos técnicos no han podido continuar con el análisis de concreto, detección de filtraciones y evaluación de grietas presentes en distintas zonas del proyecto.
La falta de continuidad técnica retrasó de manera significativa la posible entrega de la Presa León. La Deuda a UANL también generó un clima de incertidumbre entre los empleados, quienes consideran que la retención de pagos funciona como presión institucional para liberar la obra sin solucionar los problemas detectados.
Fugas Y Grietas Persisten En Presa León
Las revisiones previas de los especialistas de la universidad revelaron que la Presa León aún presenta fallas relevantes. La Deuda a UANL complicó los procesos necesarios para solventarlas, ya que múltiples etapas de análisis quedaron detenidas por falta de recursos y personal con pago vigente.
Los ingenieros identificaron fisuras en diferentes secciones, grietas que requieren sellado especializado y fugas que comprometen el funcionamiento hidráulico del proyecto. Estas irregularidades ya habían sido documentadas en informes parciales entregados en meses anteriores.
La universidad no puede emitir un dictamen final mientras estos puntos permanezcan sin corregirse. Los especialistas enfatizaron que entregar la obra en estas condiciones implicaría riesgos estructurales que pueden manifestarse durante la operación del embalse.
La situación técnica se vuelve más compleja cada semana debido a que la falta de pagos evita la contratación de personal adicional, limita el acceso a materiales y frena el análisis complementario que se debe realizar en campo. Con la Deuda a UANL, la universidad trabaja con recursos reducidos, lo que aumenta la acumulación de pendientes.
Los empleados enfatizaron que la seguridad del proyecto requiere una revisión independiente y profesional, la cual no puede acelerarse ni condicionarse a presiones administrativas externas.
Factores Administrativos Incrementan Tensión Por La Deuda A UANL
El conflicto se agravó tras el nombramiento de Daniel Salas Limón como director de la Facultad de Ingeniería Civil. Su designación generó inquietud entre empleados, pues Salas ocupó previamente el cargo de Coordinador Interinstitucional del Agua en Agua y Drenaje. Este vínculo, sumado a la Deuda a UANL, alimentó la percepción de interferencia externa en las decisiones técnicas.
Algunos trabajadores señalaron que su llegada se dio por recomendación de integrantes de la Junta de Gobierno de la universidad con relación directa con autoridades estatales. Esto intensificó el malestar entre los empleados, quienes consideran que la imparcialidad de la supervisión podría estar en riesgo.
Adicionalmente, se reportaron despidos sin finiquito en personal contratado por empresas intermediarias, así como recortes en áreas del Instituto directamente afectadas por la falta de presupuesto. Las condiciones laborales deterioradas impulsaron nuevas denuncias internas sobre la manera en que Agua y Drenaje maneja la relación institucional.
La presión generada por la deuda incrementó el clima de conflicto. Mientras tanto, la Presa León continúa sin avanzar en su validación final, lo que complica su habilitación operativa.
Responsabilidad Técnica Se Enfrenta A Limitaciones Por Deuda A UANL
La entrega de la Presa León requiere una supervisión estricta por parte del Instituto de Ingeniería Civil, que funge como órgano técnico responsable del dictamen final. Sin embargo, la Deuda a UANL impide que la revisión avance con normalidad. Cada etapa del proceso depende de recursos económicos, personal remunerado y acceso a equipos.
Los especialistas explicaron que emitir un visto bueno requiere pruebas de resistencia, análisis de control de calidad, verificaciones estructurales y monitoreo de sistemas hidráulicos. Todos estos procesos quedaron condicionados por la falta de pagos y por la presión administrativa para acelerar tiempos.
El organismo estatal ha sostenido que la obra está concluida, pero la universidad insiste en que aún no se cumplen los criterios para entregar un dictamen positivo. La discrepancia entre ambas posturas ha derivado en un ambiente de confrontación.
El papel del gobernador Samuel García también se menciona en discusiones internas. Algunos empleados consideran que la paraestatal actúa bajo presión política para concluir la presa, mientras que otros señalan que la obra debe seguir el proceso técnico establecido, independientemente de los tiempos gubernamentales.
Escenario Actual De La Presa León
La Presa León permanece en pausa técnica y administrativa. La Deuda a UANL no solo afecta a los trabajadores involucrados, sino también a los tiempos de entrega y al avance general del proyecto. Sin recursos, no se pueden reactivar las tareas de supervisión, lo que retrasa el calendario original.
Los especialistas esperan que el organismo estatal salde los pagos pendientes para restablecer las actividades. La obra requiere ajustes y evaluaciones continuas que no pueden realizarse sin personal remunerado. La situación podría extenderse si no se determina una solución en el corto plazo.
Para los trabajadores, la normalización de pagos es indispensable para recuperar la operatividad técnica. Así, la deuda se convierte en un factor determinante que condiciona el futuro inmediato del proyecto.
UANL Confirma Adeudo Millonario de AyD por la Presa León
El conflicto por el adeudo de casi 90 millones de pesos que Agua y Drenaje (AyD) debe a la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL) continúa. El dinero corresponde a trabajos realizados por el Instituto de Ingeniería Civil en la construcción de la Presa León. Mientras tanto, el Gobierno estatal sigue sin dar respuestas claras.
Problema Creciente: El Estado No Cumple con el Pago
La UANL confirmó que aún no se ha realizado el pago a los trabajadores del Instituto de Ingeniería Civil, que incluyen ingenieros y técnicos que realizaron los trabajos en la Presa León. Estos especialistas, quienes completaron su labor, siguen sin recibir su salario debido a la falta de pago por parte de AyD.
El adeudo de 90 millones de pesos incluye no solo los salarios pendientes, sino también otros pagos por estudios realizados. La situación ha generado malestar, ya que el Gobierno estatal presionó para entregar la obra, pero aún existen fallas técnicas que la UANL se ha negado a aprobar, manteniendo la calidad de la obra como prioridad.
Falta de Transparencia y Desinformación
El pago de estos salarios ha sido una constante fuente de tensión. El personal administrativo y jurídico de la UANL está revisando los adeudos con AyD y otras dependencias, mientras se plantean nuevas medidas para garantizar el pago a los afectados. Sin embargo, el proceso sigue siendo lento, y AyD no ha dado explicaciones claras sobre la razón detrás de los retrasos.
Desde el principio, el Instituto de Ingeniería Civil y otros trabajadores han denunciado que no solo fueron presionados para acelerar la entrega de la obra, sino que también se les dejó de pagar, lo que ha generado un grave problema económico para los empleados. Esta situación está lejos de ser resuelta y la falta de transparencia y explicaciones claras por parte del gobierno solo agravan la frustración.
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